Manifiesto, restaurante tacna-italiano

Anteriormente había venido a Manifiesto a probar sus chilcanos y unos piqueos, que me dejaron con el ‘bichito’ de volver, sobre todo por la comida tacneña en donde el chef Giacomo Bocchio la luce y resalta, agregándoles sus técnicas de alta cocina e influencias italianas.

Por ser un gastrobar el ambiente es mucho más relajado, aquí podemos encontrar platos muy elaborados pero también puede ser un buen punto para las noches del fin de semana.

Esta vez me atendió el mozo Alejandro, que me explicaba los detalles de los platos, siempre con buena onda y preocupado en que mi almuerzo sea especial.

Pedí el Estofado de la nonna (s/.48), que es un suculento estofado de ternera acompañado de un cremoso puré de racacha; el plato llegó a mi mesa más rápido de lo que esperaba y por donde se lo mire lucía exquisito.

El puré tiene un toque dulce, la ternera se deshacía entre el jugo del estofado y los dos juntos era una maravilla en la boca; se notaba la calidad de la ternera y por lo que leí, tienen máximo cuidado en su crianza y cruce.
Acompañado por mi helada limonada(s/.8), decidí pedir un postre para rebelarme ante el verano y las dietas.

Era la panna cotta de manjar blanco de Moquegua, acompañado de plátano en caramelo de pisco y praliné de pecanas (s/.24), la presentación elegantísima y comer la panna cotta de manjar blanco fue una maravilla, quedando muy satisfecha por mi elección.

Así que ya saben, Manifiesto les ofrece una buena opción tanto para el día y la noche; yo prometo volver para comer el Picante a la tacneña(s/.28), típico plato de Tacna pero con la experiencia reconocida de Giacomo.